Este juego, para los que conocen la saga, es igualito a su juego original, el pokemon básico (creo que eran azul y rojo) o bueno, más bien, la edición posterior, el amarillo, ya que no tienes como elegible los pokemons básicos, si no un pikachu o un eevee depende de que versión te compres.
Por el resto, mantiene casi todo igual al viejo juego de Game Boy, han eliminado casi todas las novedades de versiones posteriores, dejando el juego tan simple como lo fue al inicio, y han implementado un sistema nuevo de captura, más parecido al Pokemon Go, versión para móvil, ya que para capturar un pokemon no lo tienes que debilitar primero, si no que consiste en lanzar y lanzar y lanzar pokeballs hasta que alguna lo atrape.
Dicho esto, mi mayor decepción con el juego fue que ya no hay batallas aleatorias, o sea, peleas contra personas en combates de entrenador, pero no contra pokemons libres, esto para mi tiene sentido, al fin y al cabo eres un entrenador de pokemon, no un mutilador asesino de criaturitas, pero, claro, si lo que te gusta es ir de pelea en pelea leveando y luchando, tiene sus desventajas.
La forma de subir de nivel es capturando pokemons, y cuando tienes muchos y los mandas al profesor te dan caramelos que suben los stats de tus propios pokemons, todo está bastante bien pensado y se vuelve un juego muy dinámico y personalizable.

Tengo poco que decir, aparte de que hay ciertos pokemons que me ha costado mucho tener porque solo se pueden conseguir en la edición pikachu, los he conseguido porque los tengo el pokemon Go y me los puedo pasar a este juego, de otro modo sería imposible ya que no conozco a nadie con el juego en la vida real.

Y eso es todo, para mi toda una bonita regresión a la infancia. He disfrutado mucho jugando y aún lo hago pues es un juego al que le dedico ratitos cortos en momentos puntuales.